El concepto evolutivo de Spore abrumaba desde el mismo momento en el que fue anunciado. Incluso antes de poder ver ni un solo detalle del juego, la balanza se preparaba para juzgar el futuro resultado de una manera simple pero efectiva: si se hace bien puede convertirse en un título histórico… si se hace mal se traducirá en una pifia ejemplar. Los años han pasado para ver como el universo de la arriesgada apuesta de Maxis se iba relegando al limbo de los quiero-y-no-puedo que se agolpan en el mercado del ocio electrónico, y una vez más las expectativas habían superado con creces a los resultados.
No sería por falta de posibilidades, pues la cantidad de las mismas que podrían aplicarse al simulador evolutivo nos permitían soñar con opciones de lo más dispar… pero parece que el afán creador se perdió durante la fabricación del generador de criaturas, y salvo por una par de expansiones dedicadas a guardar las apariencias, EA y Maxis dejaron que Spore se fuese haciendo pequeño en un rincón. Cada uno tenía sus ideas al respecto, porque todos los que alguna vez probaron Spore podrían haber inculcado un nuevo modo de juego a sus desarrolladores, cada uno distinto del anterior. Sin embargo, ahora que nadie parece recordar aquella epopeya del entretenimiento, EA anuncia Darkspore… y la última de las palabras que forman este nombre compuesto no nos deja lugar a dudas.
La idea detrás de este futuro lanzamiento supone un cambio radical respecto a lo que a Spore se refiere, y de hecho nos hallamos ante un juego completamente distinto y que no debe considerarse un elemento nuevo de la colección de títulos del simulador evolutivo. En primer lugar, nos encontraremos ante un juego de rol y acción, de manera que el mismo desarrollo de las partidas diferirá en gran medida de lo visto en Spore, y se dispondrá de una trama argumental que vaya hilando los acontecimientos y nos permita ir avanzando con un ritmo adecuado. Hasta aquí poco o nada que ver con el título de referencia, y podríamos haber pasado el avance sin pronunciar su nombre y hacer como que hablamos de un juego de rol cualquiera… pero los años de trabajo invertidos por Maxis tenían que resultar rentables a medio plazo, y es aquí donde Darkspore reduce las diferencias.
El juego de rol hará uso de la creación de criaturas del simulador Spore, aunque para entender su cometido dentro del argumento es necesario esperar un par de párrafos. Podemos adelantar que con dicho editor tendremos la posibilidad de crear distintos personajes para acompañar a nuestro protagonista, de manera que no nos hallaremos ante un juego con una serie de protagonistas fijos, si no que se nos dará la posibilidad de modificar sus atributos para intentar crear un grupo más equilibrado o, al menos, a nuestro gusto. Por supuesto, al tratarse de conceptos bastante distintos, es de esperar que el creador de criaturas de Spore sufra ciertas modificaciones para adecuarlo al nuevo tipo de contenido, y es que si hablamos de un juego de rol con ambientación ciencia ficción esperamos encontrarnos todo un arsenal de nuevas posibilidades orientadas a la destrucción masiva de planetas.
Conoceremos a la raza de los Crogenitores, quienes se encargan de recorrer todo el universo para estudiar a las distintas especies que habitan en cada planeta de cada galaxia, realizando experimentos para poder afectar su ADN y así ejercer el control sobre las razas que dominan cada una de las zonas del universo. Sin embargo, esta forma tan pacífica de dominar el infinito no podía llevarse a cabo sin algún tipo de efecto secundario que dé lugar a una línea argumental entretenida, y en este caso nos encontramos con que debido a un accidente genético los Crogenitores crean Darkspore, algo muy complicado de explicar pero que podría resumirse como un efecto o fuerza genética capaz de mutar rápidamente a cualquier ser vivo existente, remodelando las formas de vida de planetas enteros con gran celeridad.
Nuestro protagonista será Zrin, un criminal Crogenitor al que se le inyecta el E-DNA, sustancia que potencia los efectos de Darkspore, convirtiéndose en un ser capaz de mutar para adquirir nuevas formas o adaptarse al entorno. A partir de ese momento su misión será crear un grupo de héroes que pueda hacer frente a la amenaza Darkspore, buscando entre distintos ADN para formar al escuadrón que pueda salvar al universo de esta amenaza genética sin par. Claro que a su vez irá haciendo uso de sus nuevas capacidades para acabar con los engendros Darkspore que se vayan interponiendo en su camino, y conforme vayamos encontrando nuevos personajes los iremos adoptando en nuestro grupo de aventureros.
Sacado de Meristation
No sería por falta de posibilidades, pues la cantidad de las mismas que podrían aplicarse al simulador evolutivo nos permitían soñar con opciones de lo más dispar… pero parece que el afán creador se perdió durante la fabricación del generador de criaturas, y salvo por una par de expansiones dedicadas a guardar las apariencias, EA y Maxis dejaron que Spore se fuese haciendo pequeño en un rincón. Cada uno tenía sus ideas al respecto, porque todos los que alguna vez probaron Spore podrían haber inculcado un nuevo modo de juego a sus desarrolladores, cada uno distinto del anterior. Sin embargo, ahora que nadie parece recordar aquella epopeya del entretenimiento, EA anuncia Darkspore… y la última de las palabras que forman este nombre compuesto no nos deja lugar a dudas.
La idea detrás de este futuro lanzamiento supone un cambio radical respecto a lo que a Spore se refiere, y de hecho nos hallamos ante un juego completamente distinto y que no debe considerarse un elemento nuevo de la colección de títulos del simulador evolutivo. En primer lugar, nos encontraremos ante un juego de rol y acción, de manera que el mismo desarrollo de las partidas diferirá en gran medida de lo visto en Spore, y se dispondrá de una trama argumental que vaya hilando los acontecimientos y nos permita ir avanzando con un ritmo adecuado. Hasta aquí poco o nada que ver con el título de referencia, y podríamos haber pasado el avance sin pronunciar su nombre y hacer como que hablamos de un juego de rol cualquiera… pero los años de trabajo invertidos por Maxis tenían que resultar rentables a medio plazo, y es aquí donde Darkspore reduce las diferencias.
El juego de rol hará uso de la creación de criaturas del simulador Spore, aunque para entender su cometido dentro del argumento es necesario esperar un par de párrafos. Podemos adelantar que con dicho editor tendremos la posibilidad de crear distintos personajes para acompañar a nuestro protagonista, de manera que no nos hallaremos ante un juego con una serie de protagonistas fijos, si no que se nos dará la posibilidad de modificar sus atributos para intentar crear un grupo más equilibrado o, al menos, a nuestro gusto. Por supuesto, al tratarse de conceptos bastante distintos, es de esperar que el creador de criaturas de Spore sufra ciertas modificaciones para adecuarlo al nuevo tipo de contenido, y es que si hablamos de un juego de rol con ambientación ciencia ficción esperamos encontrarnos todo un arsenal de nuevas posibilidades orientadas a la destrucción masiva de planetas.
Conoceremos a la raza de los Crogenitores, quienes se encargan de recorrer todo el universo para estudiar a las distintas especies que habitan en cada planeta de cada galaxia, realizando experimentos para poder afectar su ADN y así ejercer el control sobre las razas que dominan cada una de las zonas del universo. Sin embargo, esta forma tan pacífica de dominar el infinito no podía llevarse a cabo sin algún tipo de efecto secundario que dé lugar a una línea argumental entretenida, y en este caso nos encontramos con que debido a un accidente genético los Crogenitores crean Darkspore, algo muy complicado de explicar pero que podría resumirse como un efecto o fuerza genética capaz de mutar rápidamente a cualquier ser vivo existente, remodelando las formas de vida de planetas enteros con gran celeridad.
Nuestro protagonista será Zrin, un criminal Crogenitor al que se le inyecta el E-DNA, sustancia que potencia los efectos de Darkspore, convirtiéndose en un ser capaz de mutar para adquirir nuevas formas o adaptarse al entorno. A partir de ese momento su misión será crear un grupo de héroes que pueda hacer frente a la amenaza Darkspore, buscando entre distintos ADN para formar al escuadrón que pueda salvar al universo de esta amenaza genética sin par. Claro que a su vez irá haciendo uso de sus nuevas capacidades para acabar con los engendros Darkspore que se vayan interponiendo en su camino, y conforme vayamos encontrando nuevos personajes los iremos adoptando en nuestro grupo de aventureros.
Sacado de Meristation